Fisiopatología de la retención urinaria
La retención urinaria es una situación en la que el paciente no puede vaciar toda la orina de su vejiga. La retención urinaria puede ser aguda (es decir, la incapacidad repentina de orinar después de recibir anestesia durante una intervención quirúrgica) o crónica (es decir, la incapacidad gradual de vaciar completamente la vejiga debido al agrandamiento de la glándula prostática en los hombres). La retención de orina se debe a una obstrucción que impide parcial o totalmente el flujo de orina o a que la vejiga no es capaz de crear una fuerza suficiente para expulsar toda la orina. Además de causar molestias, la retención urinaria aumenta el riesgo del paciente de desarrollar una infección del tracto urinario (ITU). Véase en la figura 16.5[1] una imagen de una próstata agrandada que bloquea el flujo de orina desde la vejiga hacia la uretra.
Los síntomas de la retención urinaria pueden variar desde ninguno hasta un dolor abdominal intenso.[2] Los proveedores de atención médica utilizan la historia clínica del paciente, los hallazgos del examen físico y las pruebas de diagnóstico para encontrar la causa de la retención urinaria. El personal de enfermería suele recibir órdenes de medir las cantidades de residuo posmiccional cuando se sospecha de retención urinaria. Las mediciones del residuo posmiccional se realizan después de que el paciente haya vaciado utilizando un escáner vesical o insertando una sonda urinaria recta para determinar la cantidad de orina que queda en la vejiga. Consulte el siguiente cuadro sobre cómo realizar una exploración de la vejiga a pie de cama. Lee sobre otras pruebas diagnósticas relacionadas con la retención urinaria, como las pruebas urodinámicas y la cistoscopia, en la sección «Aplicación del proceso de enfermería» de este capítulo[3].
Complicaciones de la retención urinaria
En la mayoría de los casos, el paciente tiene la sensación de que todavía hay orina en la vejiga después de haberla vaciado. La retención urinaria hace que el paciente se sienta incómodo. Hay que tener en cuenta que puede darse sola o unida a la incontinencia urinaria.
Al igual que en el caso de los cuidados de enfermería para el riesgo de hemorragia o los cuidados de enfermería para la neumonía, una enfermera en ejercicio o un estudiante de enfermería debe ser capaz de diagnosticar y desarrollar eficazmente un plan de cuidados de enfermería para la retención urinaria.
Tras las valoraciones, el siguiente paso debe ser el desarrollo de las intervenciones de enfermería. Las intervenciones del plan de cuidados de enfermería para la retención urinaria deben tratar de facilitar la micción. Estas intervenciones deben ser las que se ilustran a continuación.
Indicar al paciente y a sus familiares que estén atentos a los signos y síntomas de distensión de la vejiga, como la urgencia, la falta o la reducción de orina, la frecuencia, la vacilación y la distensión o el malestar en la parte inferior del abdomen.
Enseñanza al paciente para la retención de orina
La retención urinaria, también denominada ischuria, puede definirse como una condición médica en la que la vejiga no drena completamente después de orinar. Las personas sedentarias, inmóviles o estrictamente confinadas a la cama pueden sufrir retención urinaria e incontinencia.
Además, las personas que padecen trastornos médicos como la HBP, la histerectomía, la cirugía de disco o las que toman medicamentos (por ejemplo, fármacos para la presión arterial alta, anticolinérgicos y antihistamínicos) también pueden correr el riesgo de desarrollar retención urinaria y distensión de la vejiga, ya que estos medicamentos pueden interferir con las señales nerviosas necesarias para relajar los esfínteres.
En los casos de retención urinaria aguda, suele ser necesario un tratamiento rápido con una sonda. En cambio, la retención urinaria crónica o de larga duración puede requerir un tratamiento más amplio. La retención urinaria aguda o crónica puede tener varias opciones de tratamiento, dependiendo de la razón subyacente y de la gravedad de los síntomas.
Diagnóstico de enfermería: Retención urinaria relacionada con el bloqueo mecánico debido al agrandamiento de la próstata, secundario a la hiperplasia benigna de próstata (HBP), evidenciado por el goteo de orina, la incontinencia, la micción frecuente y la vacilación, el vaciado incompleto de la vejiga y la presencia de orina residual
Deterioro de la eliminación urinaria evaluación de enfermería
Este plan de cuidados de enfermería es para pacientes que experimentan retención urinaria. Los pacientes pueden experimentar retención urinaria por numerosas razones. Algunas de estas razones son: estenosis, agrandamiento de la próstata, efectos secundarios de los medicamentos, neuropatía diabética, uteterocele, por nombrar algunas.
La retención urinaria se produce cuando los pacientes son incapaces de vaciar completamente la vejiga de orina. Los pacientes suelen decir a la enfermera que sienten que todavía tienen orina en la vejiga y sienten la necesidad de orinar aunque ya lo hayan hecho. La retención urinaria hace que el paciente se sienta incómodo. Algunos pacientes tienden a sentirse avergonzados por esto y pueden no compartir este problema con la enfermera. La enfermera debe evaluar los hábitos urinarios del paciente y asegurarse de que vacía completamente la vejiga.
Divulgación importante: Por favor, tenga en cuenta que estos planes de atención se enumeran sólo con fines de ejemplo/educativos, y algunos de estos tratamientos pueden cambiar con el tiempo. No trate a un paciente basándose en este plan de cuidados.