Lesión en los isquiotibiales
Los músculos del cuádriceps trabajan en un grupo de cuatro. Ayudan a ponerse de pie, caminar, trepar y ponerse en cuclillas, y son especialmente activos a la hora de dar patadas, saltar, montar en bicicleta y correr. Esto los hace propensos a sufrir tensiones y lesiones en muchos deportes.
Dependiendo de la gravedad de la lesión, puede ser aconsejable empezar a mover y fortalecer los músculos de nuevo, tan pronto como sea posible, o evitar poner cualquier peso en la pierna lesionada (para las lesiones de grado 3, su médico de cabecera puede recomendar el uso de muletas).
Ponga una bolsa de hielo en el muslo durante 10-20 minutos, cada 2-3 horas, para aliviar el dolor. (No pongas el hielo directamente sobre la piel, ya que puede provocar una quemadura. Envuélvelo en un paño de cocina húmedo. Retire la compresa si aumenta la irritación. Deja que la zona vuelva a su temperatura normal antes de volver a aplicar el hielo).
Puedes probar con analgésicos antiinflamatorios como el ibuprofeno. Algunos analgésicos antiinflamatorios también vienen en forma de cremas o geles, que puedes frotar sobre la zona del cuádriceps. Suelen producir menos efectos secundarios que los que se toman por vía oral. Si no puedes tomar analgésicos antiinflamatorios, pueden ser útiles otros analgésicos como el paracetamol, con o sin codeína añadida. Pida consejo a su médico o farmacéutico.
Rehabilitación de las lesiones del recto femoral en atletas que dan patadas
Los pequeños desgarros de este tendón provocan dolor o dificultan la marcha y la participación en otras actividades cotidianas. Un desgarro completo del tendón del cuádriceps es una lesión incapacitante. Casi siempre requiere una intervención quirúrgica, seguida de fisioterapia para recuperar el movimiento y la función plenos de la rodilla.
Los cuatro músculos del cuádriceps se unen justo por encima de la rótula para formar el tendón del cuádriceps. El tendón del cuádriceps une los músculos del cuádriceps a la rótula. La rótula está unida a la tibia por el tendón rotuliano. Trabajando juntos, los músculos del cuádriceps, el tendón del cuádriceps y el tendón rotuliano forman un mecanismo de poleas para enderezar la rodilla.
Cuando el tendón del cuádriceps se rompe completamente, el músculo deja de estar anclado a la rótula. Sin esta fijación, la rodilla no puede enderezarse cuando los músculos del cuádriceps se contraen. Los pacientes pueden experimentar una importante hinchazón o hematoma, o notar una hendidura o hueco si palpan la zona por encima de la rótula.
El desgarro del cuádriceps suele producirse cuando hay una carga pesada en la pierna con el pie plantado y la rodilla parcialmente flexionada. Piensa en un aterrizaje torpe de un salto mientras juegas al baloncesto. La fuerza del aterrizaje es demasiado para el tendón y éste se desgarra.
Tendinitis del cuádriceps
Los cuádriceps son un grupo de músculos que se encuentran en la parte delantera del muslo y se extienden hasta justo debajo de la rótula. El tendón del cuádriceps pasa por encima de la rótula, se conecta con el tendón rotuliano y se puede sentir como un bulto (se inserta en la tuberosidad tibial) en la parte delantera de la espinilla, justo debajo de la rodilla. En latín, cuádriceps significa «cuatro cabezas» o cuatro músculos. Estos largos músculos corren un alto riesgo de sufrir tensiones musculares porque atraviesan las articulaciones de la cadera y de la rodilla.
Los músculos del cuádriceps se relacionan directamente con los músculos isquiotibiales cuando la cadera se mueve y la rodilla se flexiona durante las actividades deportivas. Por lo tanto, una distensión o un desgarro en los músculos isquiotibiales o en los cuádriceps afecta directamente a la tensión o a la carga ejercida sobre el otro. Una distensión del músculo cuádriceps se refiere a un daño en las fibras musculares y posiblemente en sus tendones asociados en la parte anterior del muslo superior. Esto puede ocurrir con un movimiento aparentemente inocente, como levantar peso, cambiar de dirección repentinamente y girar. Muchos atletas sufren una distensión muscular como resultado de su deporte, pero los guerreros de fin de semana que sólo realizan actividades ocasionales son más vulnerables a las lesiones musculares, especialmente si no calientan y estiran adecuadamente.
Comentarios
Cada uno de nuestros muslos tiene cuatro músculos cuádriceps. Cuando un movimiento brusco hace que uno o más músculos del cuádriceps se desgarren o se tensen, se pueden experimentar síntomas como dolor, hinchazón, hematomas y limitación del rango de movimiento en la pierna afectada.
La mayoría de las lesiones del cuádriceps no requieren un diagnóstico médico. Si el desgarro o la distensión es grave, el médico le hará una exploración física de la zona y puede realizarle pruebas de imagen para descartar otras causas de su dolor.
Si acude a su médico por una lesión de cuádriceps, es posible que le recete medicamentos para aliviar el dolor y la inflamación y que le indique una rutina de fisioterapia que deberá realizar con el tiempo mientras se recupera. Los desgarros graves del cuádriceps -aquellos en los que el músculo se ha seccionado por completo- requerirán una intervención quirúrgica.