Perro con síndrome de Down
El humanzee (Homo sapiens × Pan troglodytes) es un hipotético híbrido de chimpancé y humano. El biólogo soviético Ilya Ivanovich Ivanov realizó intentos serios de crear un híbrido de este tipo en la década de 1920, y posiblemente los investigadores de la República Popular China en la década de 1960, aunque ninguno de ellos tuvo éxito. La palabra portmanteau humanzee para referirse a un híbrido humano-chimpancé parece haber entrado en uso en la década de 1980[1].
La posibilidad de que existan híbridos entre humanos y otros simios se ha barajado al menos desde la época medieval; San Pedro Damián (siglo XI) afirmó que le habían hablado de la descendencia de una mujer humana que se había apareado con un simio[2], y lo mismo hicieron Antonio Zucchelli, un fraile capuchino franciscano italiano que fue misionero en África de 1698 a 1702[3], y Sir Edward Coke en «The Institutes of the Lawes of England»[4].
Los chimpancés y los humanos están estrechamente emparentados, ya que comparten el 95% de su secuencia de ADN y el 99% de las secuencias de ADN codificante[5]. El dato más cercano que se conoce es que la hibridación entre chimpancés y bonobos, que comparten el 99,6% del genoma[6] (y véase el gráfico) es fácilmente posible[7]. Algunos autores afirman incluso que «la escisión de la población entre bonobo y chimpancé se produjo relativamente cerca en el tiempo de la escisión entre el ancestro bonobo-chimpancé (es decir, el ancestro del género Pan) y los humanos»,[8] o que los Pan, especialmente los bonobos,[9][10] son un «fósil viviente» cercano a nuestros ancestros, «Pan prior»[11].
Animales con síndrome de Down
Presentamos un caso de trisomía 22 en chimpancés en una hembra nacida en cautividad. Dado que el cromosoma 22 de los grandes simios es homólogo al cromosoma 21 humano, el presente caso es análogo a la trisomía 21 humana, también llamada síndrome de Down. El chimpancé del presente caso experimentó un retraso en el crecimiento; cataratas infantiles y problemas de visión, como nistagmo, estrabismo y queratocono; defecto septal auricular congénito e hipodoncia. Todos estos síntomas son comunes en el síndrome de Down humano. Este caso es el segundo que se comunica de trisomía 22 en el chimpancé. La chimpancé de nuestro caso se quedó ciega a los 7 años, lo que dificulta su vida social con otros chimpancés, pero se le han ofrecido oportunidades de interactuar con otros individuos coetáneos de forma rutinaria. Creemos que será esencial proporcionarle los mejores cuidados a lo largo de su vida.
Ovejas con síndrome de Down
Aquí informamos del segundo caso confirmado de aberración cromosómica en chimpancés equivalente al síndrome de Down humano, esta vez en el Santuario de Kumamoto, Centro de Investigación de la Vida Silvestre, Universidad de Kyoto. También se observaron en el chimpancé los rasgos de desarrollo característicos del síndrome de Down en los seres humanos; sin embargo, a diferencia del primer caso notificado, este chimpancé sobrevivió hasta la edad adulta.
Intentamos mejorar la calidad de vida de este chimpancé, ofreciéndole y gestionando oportunidades de interacción social normal. Tales esfuerzos se consideran clave en el cuidado de los chimpancés discapacitados en cautividad.
Informamos de un caso de trisomía 22 en una hembra nacida en cautividad. Dado que el cromosoma 22 de los grandes simios es homólogo al cromosoma 21 humano, el presente caso es análogo a la trisomía 21 humana, también llamada síndrome de Down. El chimpancé del presente caso experimentó un retraso en el crecimiento; cataratas infantiles y problemas de visión, como nistagmo, estrabismo y queratocono; defecto septal auricular congénito e hipodoncia. Todos estos síntomas son comunes en el síndrome de Down humano. Este caso es el segundo que se comunica de trisomía 22 en el chimpancé. La chimpancé de nuestro caso se quedó ciega a los 7 años, lo que dificulta su vida social con otros chimpancés, pero se le han ofrecido oportunidades de interactuar con otros individuos coetáneos de forma rutinaria. Creemos que será esencial proporcionarle los mejores cuidados a lo largo de su vida.
Gorila con síndrome de Down
Kanako nació en cautividad en el Santuario de Kumamoto y desarrolló algunas características anormales que la diferencian de otros chimpancés. Sus ojos, por ejemplo, estaban cruzados y a la edad de un año desarrolló cataratas. Se quedó ciega a los siete años. Además, tenía algunas anomalías cardíacas y dientes poco desarrollados.
Todas estas características son un reflejo del síndrome de Down en los humanos, que es una condición genética causada por la presencia de todo o parte de un cromosoma 21 adicional. Una copia completa del cromosoma 21 se conoce como trisomía 21.
Los pacientes con síndrome de Down presentan algunas dismorfologías craneofaciales, como una reducción general del tamaño del cráneo, cabeza plana, pliegues epicánticos, puente nasal plano y boca abierta. Además, uno de los órganos más afectados en el síndrome de Down es el cerebro. Los pacientes con síndrome de Down presentan un cerebro de menor tamaño en general, concretamente un cerebelo y un hipocampo más pequeños. Esto puede dar lugar a una serie de deficiencias cognitivas, como déficits de aprendizaje y memoria. De hecho, la trisomía 21 es la causa genética más frecuente de retraso mental.